GUÍA - PUESTA A PUNTO

mayo 22, 2021

Los consejos más sencillos y recomendables para mejorar y mantener tu instrumento de cuerdas, sea del tipo que sea. Tanto si es recién comprado como uno que ya tienes y quieres que suene y se toque mejor que nunca. Hacer estos ajustes (o hacks o mods) también te harán sentir orgulloso al haberlos hecho tu mismo, a la vez que te ahorrarán algo de dinero.  

AVISO: Estos conejos, como todo otro consejo o recomendación en esta web, se basan solo en mi experiencia personal y si los comparto de forma pública es únicamente con la mejor de las intenciones. Varios de los ajustes descritos requieren del manejo de cuerdas y herramientas no aptas para los más pequeños y que pueden entrañar ciertos peligros si no se toman las precauciones necesarias.  En ningún caso me puedo hacer responsable de cualquier desperfecto, accidente o perjuicio resultante. Ten mucho cuidado en todo momento y si no tienes claro algo, simplemente ni lo intentes y pide ayuda. 

  1. EVITA EL PLÁSTICO BARATO: en los instrumentos baratos, piezas clave como la cejuela y la selleta suelen ser de plástico. Si bien hacen su función, sea cual sea el instrumento, siempre serán mejores otros materiales como el hueso o el tusk (material derivado del plástico pero especialmente creado para estas piezas y de mayor calidad). En tiendas de música y mega-stores online, se pueden encontrar repuestos de calidad para cualquier instrumento por unos 5-10€.

    CONSEJO: aunque  en muchos casos las cejuelas suelen tener unas medidas estándar según el instrumento, lo mejor es medir el ancho de la pieza y confirmar que coincida.  

    CONSEJO
    : a la hora de buscar repuestos online puedes encontrar muchos más resultados buscando en inglés, usando frases como por ejemplo "guitar bone nut" o "ukelele tusk nut", pero siempre ten cuidado con a quien le compras y ten en cuenta el coste de los gastos de envío, más aun si la tienda no está en España.



    Gama TuskXL

  2. GRAFITO EN LA CEJUELA: este ajuste es tan sencillo y útil que me parece básico para prácticamente cualquier instrumento de cuerdas. Se basa simplemente en aflojar las cuerdas y apartarlas a los lados del mástil, de modo que los pequeños carriles tallados en la cejuela queden a mano. Con ayuda de un lápiz, idealmente un portaminas, "pinta" de grafito el interior de esos carriles, lo que mejorará el "asentamiento" y fricción de las cuerdas sobre los mismos, y ayudará a evitar roturas a esa altura de cuerda.

    Aplica grafito a los carriles de la cejuela. Imagen de stringjoy.com


  3. REBAJA LA CEJUELA: pocas cosas dan más rabia que comprar un instrumento nuevo y descubrir que al pisar las cuerdas a lo largo del mástil, trastea. Por eso, y sobre todo en el caso de  los ukeleles, ya que no suelen incorporar "alma" (truss-rod) para corregir la curvatura del mástil o patinetes de altura variable en el puente,  la mayoría de fabricantes prefieren curarse en salud y evitar que sus clientes les devuelvan el instrumento recién comprado porque trastea, dejando la cejuela demasiado alta. Lo cual evita el trasteo, pero hace que la interpretación sea demasiado complicada, requiriendo de mucha fuerza en los dedos para que las notas suenen nítidas. Esto se nota sobre todo en los primeros trastes (traste 1 a 7), pero si el exceso de altura es  muy exagerado también puede afectar la interpretación en los trastes al final del mástil. 

    Una correcta altura de las cuerdas hace que el instrumento sea más cómodo de tocar, sin trastear

    Aunque existen herramientas específicas, técnicas de medición y alturas de referencia según el instrumento. Y aunque un lutier siempre debería hacer un trabajo mucho más preciso que el nuestro, este ajuste suele ser tan sencillo que en instrumentos no profesionales puede valer la pena probar a hacerlo uno mismo. 

    Para rebajar la altura de una cejuela simplemente necesitaremos aflojar y apartar las cuerdas de forma que podamos extraerla para lijar su base (nunca por el lado específicamente curvado y tallado para el acomodamiento de las cuerdas, solo por el opuesto) de forma uniforme.

    La técnica más básica es sujetar una hoja de papel de lija sobre una mesa o superficie plana con una de nuestras manos, y con la cejuela en la otra mano, moverla en círculos concéntricos sobre la lija para que la base de la misma se vaya lijando de la forma más uniforme posible. 

    Sujetar la lija y hacer círculos con la base de la pieza
    Sujeta la lija y haz movimientos circulares para lijar la base de la pieza

    Es muy importante procurar que la presión de la cejuela sobre la lija sea la misma tanto en el centro como en sus extremos, para que no acabe desnivelada hacia un lado. Además siempre es mejor no pasarse lijando e ir poco a poco, probando tras cierto lijado a poner las cuerdas y afinar el instrumento (sin necesidad de mucha precisión, solo para que las cuerdas se asienten y podamos ver la altura a la que quedan) para comprobar si hemos conseguido una altura más razonable o deberíamos seguir lijando. 

    Uno de los pros de este ajuste es que si nos pasamos, debería tener fácil solución. Desde caseramente, cortando y apilando varias capas de papel de folio con la forma de la base de la cejuela, para levantarla por debajo y corregir así el exceso de lijado, hasta comprando una cejuela de repuesto, que aunque varían según instrumento no suelen pasar de 5 o 6 euros.


  4. REBAJA LA SELLETA: como hemos visto, la altura excesiva de cejuela suele ser muy habitual, sobre todo en el ukelele, ya que los fabricantes prefieren dejarla demasiado alta antes que demasiado baja, pero en casos más raros (sobre todo en instrumentos muy baratos) el desajuste también puede estar presente en la selleta. Una selleta demasiado alta puede hacer muy difícil e incómodo tocar en los trastes más cercanos al cuerpo del instrumento (traste 12 en adelante). La técnica básica para rebajar la altura de una selleta es exactamente la misma que para una cejuela.


  5. LIMPIA LAS CUERDAS: en algunas situaciones, como por ejemplo al sudar más con el calor del verano, las cuerdas se ensucian más y más rápido de lo normal. Aunque lo ideal siempre es secarlas con un paño cada vez que acabamos de tocar y cambiarlas siempre que podamos, a veces podremos alargar un poco más la vida útil de las cuerdas si sabemos cómo limpiarlas correctamente. Este método es especialmente útil para bajistas, ya que solo usan cuerdas entorchadas bien gruesas, que son las que más se benefician de este tipo de limpieza (y las más caras de cambiar).

    Para limpiar las cuerdas necesitaremos alcohol de quemar no perfumado (disponible en cualquier bazar) y una gamuza que no deje restos. Basta con aflojar la tensión de las cuerdas, empapar con el alcohol una de las puntas del trapo y limpiar las cuerdas, primero en grupo, envolviéndolas tanto por encima como por debajo (metiendo la gamuza entre las cuerdas y la madera del mástil).

    Imagen de wikihow.com

    Una vez limpiadas en grupo es recomendable hacerlo también una a una, para lo cual lo más fácil es coger o "pellizar" la cuerda con el pulgar y el índice, pero usando el trapo en medio, y moverlo a lo largo de la cuerda, del puente hasta la cejuela. Una vez limpiadas con el extremo humedecido en alcohol es muy importante repetir el mismo proceso con una punta seca, para secar cualquier resto líquido. 

    CONSEJO: evita mojar con alcohol la madera del instrumento y una vez secadas las cuerdas, seca también el diapasón por si se hubiera mojado en algún momento. Con los instrumentos musicales, como con la salud, es mejor prevenir que curar. 

    CUIDADO: afloja siempre las cuerdas antes de hacer esto, como medida de precaución. Procura tener bien cogido el trapo y no hagas movimientos bruscos, aun con el trapo entre tu piel y la cuerda. Ten especial cuidado con las cuerdas más finas, que sin el debido cuidado pueden cortar. Mucho cuidado también con la botella de alcohol, al ser extremadamente inflamable, y tóxico si se ingiere.




  6. CAMBIA LAS CUERDAS: con práctica el proceso de cambio de cuerdas acaba siendo super sencillo y rutinario, a la par que gratificante (por la mejora de sonido de las cuerdas nuevas). Pero al principio puede ser lioso y deberemos esforzarnos por asimilar una serie de buenas prácticas que nos ahorrarán posibles disgustos y accidentes. 

    Además, el sistema de encordado varía de un instrumento a otro, por lo que explicar cada caso en concreto requeriría de una extensísima guía exclusiva solo para eso. Por lo que para evitar que esta guía de puesta a punto general se haga demasiado extensa, en este tema se limitará a una serie de consejos generales y válidos para cualquier instrumento.



    - Precaución y seguridad ante todo. Atiende a lo que haces y cuídate de cortes, pinchazos con las puntas y roturas de cuerda al girar las clavijas incorrectamente, más aún con las cuerdas metálicas.

    - Aunque no sean "necesarias" y casi nadie lo haga, el uso de cualquier gafa de seguridad, por básica que sea,  hace el cambio y manejo de cuerdas muchísimo más seguro y relajado, aunque las más seguras son las que se amoldan al rostro. 

    Las gafas de seguridad que uso actualmente y recomiendo (Bollé TRACPSI)


    - Antes de quitar las cuerdas de un instrumento nuevo o con el que aun no tenemos práctica cambiando sus cuerdas, es muy buena idea hacer algunas fotos de referencia de cómo van enrolladas o atadas, tanto a la altura de la cejuela como de la selleta.

    - Presta mucha atención a la hora de tensar y destensar para evitar roturas de cuerda al girar la clavija incorrecta, la clavija correcta en el sentido incorrecto o la clavija correcta en el sentido correcto pero tensando en exceso la cuerda. 

    - En los instrumentos eléctricos, en los que las puntas de las cuerdas tienen que entrar y salir por pequeños agujeros del puente, una vez las cuerdas a sustituir están totalmente destensadas, (insisto: solo cuando ya están destensadas) es mucho mejor cortar la cuerda (con una tijera) a la altura de las pastillas, para evitar tener que pasar el extremo de cuerda que iba enrollado al clavijero (y habrá quedado totalmente retorcido) por esos agujeros del puente y arriesgarnos a rallar la madera o pintura/laca del acabado.

    - Al poner cuerdas nuevas presta atención a cómo orientas la cuerda con respecto a la clavija. La orientación correcta hará que al girar la clavija para tensar la cuerda, ésta se enrolle "por dentro", desde dentro del mástil hacia afuera, y no al revés. 

    Vigila el sentido de las cuerdas en las clavijas a la hora de encordar

    - Antes de tensar, y tensar, y tensar las cuerdas nuevas (girando las clavijas) para afinarlas, asegúrate de que han quedado perfectamente rectas y se apoyan correctamente en sus "carriles" correspondientes, tanto en la cejuela como en el puente o selleta. Un mal apoyo en esas partes es una de las causas más habituales de rotura de cuerdas recién puestas. 

    - Nunca abandones el cambio de cuerdas a medio hacer, ni dejes el instrumento más de 24h sin cuerdas o con las cuerdas sin tensar.


  7. CORREA: una correa decente, ajustada correctamente a nuestra altura y preferencia puede hacer que tocar resulte mucho más cómodo, y nos permitirá hacer cosas con las manos mientras tenemos el instrumento encima, sin temer que se caiga o se lleve algún golpe.

    Poner los "enganches" (strap button) necesarios para fijar la correa en un instrumento que no los tiene, o cambiar los que ya lleva el instrumento por unos de seguridad, es una de las modificaciones más sencillas y prácticas en los instrumentos de cuerda. Para hacerlo lo mejor es seguir estos consejos:

    Strap Buttons de JimDunlop


    - Analiza y comprende cómo funciona tu sistema de agarre. No se instalan igual unos strap buttons sencillos y de toda la vida (como los de la imagen superior) que los de sistemas de seguridad más avanzados.

    - Lo normal es que uno de los enganches vaya justo en el centro de la base del instrumento (al ponerlo en vertical). En el centro, centro. Tanto del ancho del instrumento como de su profundidad, en la junta de las dos bandas laterales (button #2 en la imagen). 

    - El otro enganche puede ir de varias formas, por lo que antes de nada, lo mejor es pensar bien donde queremos ponerlo, teniendo muy en cuenta que la correa no moleste nunca al tocar, incluso en los trastes más altos. Lo más habitual y recomendable es poner este enganche al inicio del mástil, en la parte con forma triangular que entra dentro del cuerpo del instrumento, de modo que el tornillo entre con cierta inclinación, hacia el centro de esa parte triangular de madera, y el enganche quede por debajo del mástil cuando nos colguemos el instrumento (button #1 en la imagen)



    - Una vez estudiadas y decididas las posiciones, cubre las dos zonas con cinta aislante o de papel, para proteger la madera alrededor de arañazos con la broca. Usa un lápiz para marcar cada agujero en su posición correspondiente encima de la cinta.


    Imagen de sweetwater.com

    - Mide la longitud de los tornillos que vienen con los enganches y usa una broca algo más fina. Pégale un trozo de cinta un poco por debajo de la altura del tornillo, de forma que la cinta indicará la profundidad máxima a la que taladrar con la broca. Siguiendo estos dos consejos evitarás hacer el agujero demasiado ancho o profundo.


    Imagen de sweetwater.com

    - Embadurna la broca en jabón de manos (en pastilla mejor que líquido) o cera natural de abeja (para madera) y taladra teniendo en cuenta la inclinación necesaria en el caso del enganche del mástil, hasta que la parte de broca por debajo de la cinta haya entrado en cada agujero. El jabón o cera juega un papel muy importante, manteniendo lubricado el proceso de perforación y evitando que la madera se rompa o astille. 

    - Retira la cinta y limpia el serrín con una gamuza.

    - Mete el tornillo por el agujero del enganche y pasa la arandela por el tornillo, (de forma que cuando atornilles quede en medio, protegiendo la madera del metal del enganche).

    - Embadurna la punta del tornillo en jabón o cera y atornilla hasta que todo quede bien sujeto. Una vez más, no obvies el jabón o cera para lubricar.



  8. AYUDA EXPERTA: si no confías en tus aptitudes como "manitas", no tienes claro alguno de estos pasos, o crees que tu instrumento puede tener algún problema, lo mejor será dejarlo en manos de un profesional. No es que sobren precisamente, pero en Alicante y alrededores tenemos unos cuantos buenos lutieres. En mi caso, aunque no soy lutier, sé hacer todos estos ajustes y varios más. Y lo más probable es que si me consultas pueda ayudarte, o directamente, o recomendándote algún lutier cercanoAdemás. si eres alumno mío, y la pandemia lo permite, puedo hacerle estos ajustes a tu instrumento totalmente gratis o por muy poco dinero (según lo que necesites)